Antes de empezar quiero decir que me gustan las películas de Disney y el programa de La Voz.

Hace un par de días estaba viendo el programa y participó un niño que quedó seleccionado, el niño dijo que ya había participado años antes pero no había quedado - por cierto, dijo que no lo habían “aplanado”, nunca había escuchado esa palabra - pero lo feo no fue eso, sino que desde entonces sus amigos le hacían bullying por esta razón, es decir, los demás, quienes jamás lo han intentado, se burlaban de quien sí lo había hecho y no había triunfado, irónico ¿no?, eso me recordó la lección que más me ha gustado de una de mis películas de Disney favoritas: Ratatouille.

Esta frase la dice Anton Ego al final, cuando da una reseña del restaurante y va así:

“La vida de un crítico es sencilla en muchos aspectos, arriesgamos poco y tenemos poder sobre aquellos que ofrecen su trabajo y su servicio a nuestro juicio. Prosperamos con las críticas negativas, divertidas de escribir y de leer, pero la triste verdad que debemos afrontar es que en el gran orden de las cosas, cualquier basura tiene más significado que lo que deja ver nuestra crítica. Pero en ocasiones el crítico si se arriesga cada vez que descubre y defiende algo nuevo, el mundo suele ser cruel con el nuevo talento; las nuevas creaciones, lo nuevo, necesita amigos. Anoche experimente algo nuevo; una extraordinaria cena de una fuente singular e inesperada. Decir solo que la comida y su creador han desafiado mis prejuicios sobre la buena cocina, subestimaría la realidad; me han tocado en lo más profundo. En el pasado jamás oculte mi desdén por el famoso lema del chef Gusteau: Cualquiera puede cocinar. Pero al fin me doy cuenta de lo que quiso decir en realidad; no cualquiera puede convertirse en un gran artista, pero un gran artista puede provenir de cualquier lado. Es difícil imaginar un origen más humilde que el del genio que ahora cocina en el restaurante Gusteau´s y quien, en opinión de este critico, es nada menos que el mejor chef de Francia. ¡Pronto volveré a Gusteau´s hambriento!”

La parte importante para mí es: Cualquier basura tiene más significado que lo que deja ver nuestra crítica.

Las personas que normalmente critican por haber intentado algo y no haberlo logrado, son quienes nunca han intentado algo osado, esto lo aprendí al emprender y al hacer mis cursos, no sabía lo difícil que era hasta que lo intenté y desde que lo hice pienso dos veces antes criticar a quien lo está intentando. Lo triste es que normalmente los pasivos son quienes afectamos a los atrevidos.

Es muy fácil criticar desde la banca en el público, desde el celular o TV en la comodidad de la casa, pero como dice Anton Ego, cualquier basura, cualquier mala pelea de un boxeador, cualquier emprendimiento fallido, cualquier canción mal entonada o video de Youtube, vale más que todas las críticas que pueda recibir.

Es bueno que haya opiniones y consejos, cuando busco un restaurante reviso que a otras personas les haya gustado y me sirve mucho, con críticas me refiero a esas que no aportan nada, solo son burlas u opiniones para demeritar el trabajo de otros. Por cierto, siempre ignoro las reseñas de 1 estrella que tiran odio sin dar una explicación clara y de 5 estrellas que alaban demasiado, por lo general las primeras son producto de un momento de ira y las segundas son falsas.

Esta opinión no va dirigida a los pasivos. Más bien va dirigida a los que lo intentan, espero ayudar a que la siguiente vez que lo hagas, veas las críticas desde otra perspectiva y te afecten menos.